miércoles, 17 de marzo de 2010

Pero como nada tiene realidad... dispone a tu gusto de estas ilusiones.

Ahí estaba el guardapolvo que llenaste de dibujos en séptimo grado, y el mantel con naranjas y uvas en tonos rosas y marrones que mamá llevaba a todos los viajes, un pedazo de una de las fundas cuadriculadas bordó de los asientos de la Traffic, tu pijama rosa de Betty Boop, mi remera de Mafalda, la camiseta de Argentina que ganamos en un sorteo, tu enterito naranja que heredé, el vestido de compromiso de mamá que cada vez que me lo pongo me mira con envidia y sorpresa porque no puede creer que me entre. También estaban los acolchados multicolor con números y letras, la mitad de los pares de medias rayadas que me robaste, está tu remera con la cara de ese cantante y los conjuntos deportivos de desiree de los cinco, el mantel bordado de la abuela, la falda del vestido que usaste para tus 15, mi sombrerito rojo, el polerón de lana violeta que sabiamente combinas con la babucha verde los días que no salís de tu habitación, todas las capuchas de mis buzos, las sábanas de Snoopy, un pedazo del cuero blanco del asiento de la Rominadia, la lona de la pelopincho, y un retazo de la carpa verde vieja que iba a Lobos con nosotros, las orejas de las pantuflas de perro que no se donde terminaron, los adornos de macramé que mamá tejía, el cubrecamas de los cuadraditos de lana, tus pantalones talle 1 que nunca más le entraron a nadie. Alcancé a ver los individuales de Aladdín y una de las servilletas fucsia bordadas con azul, el pañuelo verde con estampado de cadenas amarillas de papá y la toalla de los ositos cariñosos, el cubrecolchón que nunca uso y las camperas rompeviento del temporal en Miramar.
Si te fijas se distingue la bata rosa y la azul de una tela fea que parecía un kimono, el tapadito rojo, el traje de taekwondo de Nico con el cinto amarillo incluido, el disfraz de Rey León, el de hormiguita viajera, todos tus trajes de patín, mi malla de natación, alguno de los 500 trapos amarillos que usa mamá en la cocina por mes, la frazada doble a rayas celestes grises y azules,
el cangurito de Mickey Mouse, las mantas rosas que solo se diferencian por las tramas que tienen, la bufanda rollingstone que le encontramos a mamá hace unos años, todo eso acompañado de lo que recuerdes vos ahora ...